Opinión: Elecciones, producción y defensa
El Secretario de Estado de los EEUU se dio una vuelta por varios países de Nuestra América la semana pasada: Colombia, Brasil y Guyana, entre otros. Como una «gira electoral» la caracterizó el presidente Nicolás Maduro, una apuesta para levantar la votación de su jefe Donald Trump con los votos de las mafias ultraderechistas de la Florida y otros estados de la Unión. Una gira para hacer alardes de la prepotencia imperial y de la sumisión de los gobiernos de esos países (no sus pueblos) a los intereses yanquis, amenazando a Venezuela. Una gira cuyo final coincide con ejercicios militares conjuntos de las fuerzas armadas de EEUU y Colombia cerca de nuestras fronteras, para tratar de intimidarnos. Lo que pasa es que nosotros, los venezolanos y las venezolanas no somos intimidables y no nos rendimos nunca; de esa determinación hemos dado ejemplos a lo largo de nuestra historia.
La gira de Pompeo coincidió también con el «informe» de una supuesta «comisión independiente» de la Alta Comisionada de DDHH de la ONU, sobre los derechos humanos en Venezuela, que no pasa de ser un adefesio jurídico y metodológico, con muy malas intenciones políticas contra Venezuela. Al coro se sumó el señor Joseph Borrell por la Unión Europea, diciendo -o repitiendo la cantaleta yanqui y de algunos aquí- que no hay condiciones para realizar las elecciones en diciembre y no enviarán ninguna misión de observación a las mismas.
Todos coinciden en los mismos objetivos: impedir las elecciones de la Asamblea Nacional del 6 de diciembre, obstruir las iniciativas del gobierno y la sociedad venezolana para recuperar la economía del país, derrocar a Maduro y destruir la Revolución Bolivariana, el más formidable obstáculo que el imperialismo tiene hoy para recolonizar el continente.
De allí el incremento del bloqueo, las sanciones, el robo de nuestros activos en el exterior y todas las dimensiones que hoy asume la guerra total, multiforme, del imperialismo contra nuestra Patria rebelde y bolivariana.
No obstante, el cronograma electoral avanza firme e indetenible hacia el 6 de diciembre, día en el que recuperaremos para los intereses del pueblo y de Venezuela a la Asamblea Nacional, acabando con cinco años de oprobio y entreguismo en manos de la derecha. Ante el bloqueo, las sanciones y los sistemáticos ataques desde diversos frentes para destruir nuestra economía, estamos obligados a depender de nuestras propias fuerzas; la recuperación económica del país tiene como centro la recuperación del aparato productivo, el fortalecimiento de las fuerzas productivas, en lo cual tienen un trascendental papel la clase obrera, los comuneros y comuneras y los pequeños y medianos empresarios comprometidos con la producción y el país. Es una tarea que ya comenzó y debe profundizarse en los próximos meses y años.
Pero conviene estar alertas, la consolidación de la democracia bolivariana y de la recuperación económica del país, está amenazada por el imperialismo y la oligarquía; de allí la importancia fundamental de fortalecer las capacidades defensivas de la República, y en eso viene trabajando nuestro pueblo y nuestra FANB, conducidos por el presidente Nicolás Maduro. Seguimos venciendo.